El periodonto es el conjunto de estructuras alrededor del diente que van a dar soporte para mantenerlo en el alveolo.
La periodoncia es la rama de la odontología que se encarga de prevenir, diagnosticar y tratar las enfermedades periodontales. Principalmente existen dos enfermedades: la gingivitis y la periodontis. Ambas son de origen infeccioso, es decir, están producidas por bacterias, aunque existen factores de riesgo que pueden contribuir al desarrollo de la enfermedad como la herencia familiar, el tabaco o la diabetes.
Es la fase inicial y cursa con inflamación, sangrado y enrojecimiento de encías. Se trata de una enfermedad reversible, aunque podría progresar a periodontistisi no se trata. El tratamiento de la gingivitis incluye limpiezas
profesionales y la implementación de hábitos de higiene oral adecuados.
Es la fase avanzada y es una enfermedad crónica que presenta además de esos síntomas, pérdida de hueso alrededor del diente y
consecuentemente movilidad dental, que puede llevar a la pérdida de los dientes si
no se aborda a empo.
El tratamiento principal para la periodontitis es el raspado y alisado radicular, un procedimiento que elimina la placa y el cálculo acumulados en las raíces de los dientes. Esto permite reducir la inflamación, promover la cicatrización de las encías y prevenir la progresión de la enfermedad. Sin embargo, en casos más severos, donde la pérdida de hueso y los daños en los tejidos de soporte son significativos, pueden ser necesarias cirugías periodontales avanzadas.
Entre estas técnicas quirúrgicas se encuentran las cirugías resectivas, que eliminan tejido inflamado o infectado para facilitar la limpieza y el mantenimiento del paciente, y las cirugías de regeneración periodontal, diseñadas para recuperar el tejido perdido utilizando injertos óseos, membranas o derivados de la matriz del esmalte. Estas intervenciones están orientadas a mejorar tanto la salud periodontal como la supervivencia a largo plazo de los dientes afectados.
En situaciones de periodontitis avanzada, puede ser necesario un abordaje multidisciplinar. Casos complejos con pérdida de dientes, migraciones dentales o recesiones múltiples suelen requerir la combinación de tratamientos periodontales con otras disciplinas como la prótesis, la implantología o la ortodoncia, para restaurar no solo la estética, sino también la funcionalidad y la salud de la mordida. Por ejemplo, la ortodoncia puede ser clave para reposicionar dientes desplazados antes de estabilizarlos con restauraciones definitivas.
La clave para que los resultados sean eficaces, predecibles y se mantengan en el tiempo es un programa de mantenimiento personalizado. Este incluye revisiones periódicas y limpiezas profesionales para controlar la acumulación de placa bacteriana. Además, una buena higiene oral en casa, con técnicas adecuadas de cepillado y cinta dental o cepillos interdentales, es fundamental para evitar recidivas.
Es importante destacar que factores como la predisposición genética, el consumo de tabaco o enfermedades sistémicas como la diabetes pueden influir significativamente en la progresión de las enfermedades periodontales. Por ello, adoptamos un enfoque integral, combinando tratamientos específicos con educación y prevención para ofrecer soluciones duraderas que mejoren tanto la salud bucal como la calidad de vida de nuestros pacientes.
Un problema periodontal menos conocido pero frecuente es la erupción pasiva alterada, que ocurre cuando el margen de la encía no retrocede lo suficiente tras la erupción dental, dejando expuesta solo una pequeña parte del diente. Esto puede provocar una sonrisa con apariencia de «encía prominente» o «dientes cortos», afectando tanto la estética como la función.
El tratamiento de la erupción pasiva alterada puede implicar una gingivectomía, en la que se elimina únicamente el exceso de encía para exponer una mayor superficie del diente, o un alargamiento coronario, en el que además de retirar encía es necesaria la remodelación del hueso subyacente para garantizar una solución definitiva. La elección entre ambos procedimientos depende de la cantidad de tejido disponible y la relación diente-encía-hueso en cada caso.
En algunos casos de erupción pasiva alterada, el tratamiento periodontal debe complementarse con la colocación de carillas para lograr un resultado estético y funcional óptimo.
Existen principalmente tres situaciones clínicas que resolvemos con cirugía
mucogingival, empleando injertos de encía del paladar del paciente o matrices de colágeno de origen animal.
La cirugía mucogingival se enfoca en tratar problemas relacionados con el tejido blando alrededor de los dientes e implantes. Uno de los procedimientos más comunes es el tratamiento de recesiones gingivales, que no solo puede mejorar la estética de la sonrisa, sino también prevenir la sensibilidad dental y proteger la raíz expuesta frente a caries o desgaste. En estos casos, empleamos técnicas como injertos de tejido conectivo, tomados del paladar del paciente, incluso en algunos casos matrices de colágeno, dependiendo de las características del caso.
Además de tratar las recesiones, la cirugía mucogingival incluye procedimientos para el aumento de encía queratinizada, que es esencial para mejorar la estabilidad y la salud periodontal alrededor de implantes o dientes naturales. Esto es especialmente relevante en pacientes con encías finas o en zonas con alto riesgo de acumulación de placa o inflamación recurrente.
Por último, realizamos intervenciones con fines estéticos, como el aumento del volumen gingival en torno a restauraciones dentales o implantes. Estos tratamientos no solo buscan solucionar problemas funcionales, sino también proporcionar una apariencia armoniosa y natural. Nuestro enfoque personalizado y el uso de técnicas avanzadas garantizan resultados predecibles y duraderos en todos los casos.
En nuestras clínicas dentales contamos con un equipo de profesionales altamente cualificados, cuyo objetivo es
ofrecer una atención cercana y de confianza. En nuestras clínicas de Baiona y Vigo, la salud bucal de nuestros pacientes es nuestra prioridad, y trabajamos para que cada visita sea una experiencia positiva, segura y eficaz.
La gingivitis se manifiesta con encías inflamadas, enrojecidas y sangrado al cepillarte o usar hilo dental. Aunque no siempre causa dolor, es una señal de alarma que no debes ignorar, ya que puede evolucionar a una periodontitis si no se trata.
Sí, la gingivitis es una enfermedad reversible si se detecta a tiempo y se trata con una limpieza profesional y una mejora en la higiene bucal diaria. La clave está en actuar antes de que se convierta en periodontitis.
No, los tratamientos iniciales como el raspado y alisado radicular se realizan bajo anestesia local para garantizar la comodidad del paciente. Las molestias posteriores suelen ser leves y temporales.
Sí, manteniendo una rutina de higiene oral adecuada, con cepillado y uso de cinta dental, junto con visitas regulares al dentista para limpiezas profesionales y revisiones.
Sí, la inflamación crónica causada por la periodontitis puede comprometer los implantes, aumentando el riesgo de periimplantitis. Por eso, un buen estado periodontal previo es crucial para el éxito de los implantes.
La enfermedad periodontal se diagnostica a través de una evaluación dental que incluye el examen visual de las encías, medición de la profundidad de los surcos gingivales con una sonda periodontal y radiografías para evaluar la pérdida ósea.
Las enfermedades periodontales tienen un importante componente genético. Si tus padres padecían enfermedades de las encías, tú también podrías sufrirla. Es importante identificar estos factores para reducir el riesgo de desarrollarla.
Fumar compromete la vascularización de las encías y es un reconocido factor de riesgo para las enfermedades periodontales.
No, a pesar de que la periodontitis es una enfermedad crónica, se puede tratar y mantener estable a lo largo del tiempo. Mantener una buena higiene oral y acudir a revisiones periódicas cada 6 meses es fundamental para que la enfermedad no avance.
Sí, a veces la enfermedad debuta de forma silenciosa y podemos perder hueso o sufrir retracción de encías sin sentir dolor. Es importante chequear la salud de nuestras encías en nuestra visita al dentista.
Sí, actualmente existen técnicas de cirugía mucogingival que permiten cubrir las recesiones. Es necesario un análisis individualizado de cada caso para saber si podremos cubrirlas total o parcialmente.
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